La observación de fauna silvestre es una de tantas ocupaciones de fin de semana, con las cuales podemos disfrutar en compañía de nuestros hijos. El aprendizaje de los valores éticos en cuanto a amor y respeto de la naturaleza y entorno se deberían fomentar desde la más temprana edad, así como el conocimiento básico del medio.
De esta manera un sencillo paseo por el campo se puede convertir en la mayor de las aventuras con la búsqueda de huellas, identificación de flora y por supuesto avistamiento e incluso fotografía de fauna en todos sus múltiples campos.
Nuestros peques aprenderán divirtiéndose a distinguir tanto de forma visual como por su canto, entre un ave de bosque u otra de parque, entre una mariposa diurna y una polilla nocturna, o entre un ciervo joven o un corzo cuando estos señores del bosque nos deleiten con sus bramidos y ladridos entre esquivas apariciones.
¿Cómo elegir el equipo de observación?
La elección de los equipos e instrumentos de observación dependerá en gran medida de la edad de nuestros pequeños acompañantes, pues el correcto uso de los mismos conllevará un mayor disfrute a la vez que fomentará el crecimiento e interés por la afición.
Por regla general a la gente menuda le cuesta la observación monocular por el simple hecho de que aún no saben guiñar el ojo correctamente, por lo que un ocular con un buen diámetro de lente y grandes campos a bajos aumentos, les ayudará en gran medida la correcta adecuación al instrumento.
De igual manera unos prismáticos cómodos en cuanto a peso, aumentos medios y sobre todo con gran recorrido inter-pupilar, facilitarán la adaptación a las caritas más exigentes.
En este sentido el consejo del profesional es de gran ayuda, pues nos indicará en todo momento la opción existente y que mejor se adecue a nuestras necesidades.
Correctamente equipados y con las mayores ganas del mundo es hora de salir y disfrutar con ellos de esta Afición para Compartir.
Adolfo Bernalte Sánchez
Astronomía e Instrumentos Ópticos
Foto Roma Instrumentos