Uno de los fenómenos astronómicos más impresionantes y sencillos de observar, se produce cuando la proyección de la sombra de la tierra, alcanza la luna, y ésta se torna de color rojo, la llamada “Luna de Sangre” que tanto fascinó y atemorizó a los pueblos de la antigüedad.
Pues sí, nos referimos a los Eclipses.
Durante el año 2018, hemos tenido la oportunidad de disfrutar de un eclipse de luna, el pasado mes de enero, pero para aquellos que no pudieron verlo, nuestro amado satélite nos va a ofrecer de nuevo un espectáculo sobrecogedor, ya que si la meteorología lo permite, el próximo día 27 de julio nuestra luna saldrá por el horizonte eclipsada, alzándose sobre el horizonte ya teñida de granate.
Pero, ¿Qué es un Eclipse de Luna?
Cuando en su movimiento orbital, la tierra se interpone entre el sol y la luna, la primera, proyecta un cono de sombra que oscurece literalmente el satélite. Para que ésto ocurra, los tres cuerpos celestes, deberán estar alineado o muy próximos a estarlo, dándose pues los eclipses en la fase correspondiente a Luna Llena. Ahora bien, dependiendo de la cantidad de ocultación, los eclipses se pueden clasificar en Totales (cuando el cono de sombra oculta toda la superficie de la luna), parciales (cuando sólo una parte de la luna es ocultada), y penumbrales (cuando la luna entra en el cono de penumbra de la tierra.
¿ Y por qué se dan estos tres casos diferentes?
Muy fácil, como la distancia entre la tierra y la luna no siempre es la misma, debido a la ligera forma elíptica de su órbita, el grado de ocultación varía. Si además tenemos en cuenta que la Luna orbita la tierra con un plano de inclinación de unos 5º, aún produciéndose una fase de Luna llena cada 28 días, no siempre se dará el caso de estar alineados los tres principales protagonistas, luego los eclipses son algo excepcional que no ocurre todos los meses.
Fuente: Wikipedia
¿Que produce el color rojo característico de los Eclipse Totales de luna?
Cuando la Tierra oculta con su sombra la totalidad de la luna, los pocos rayos del sol que alcanzan ésta última, se ven refractados por la atmósfera terrestre, siendo las longitudes de onda del rojo las que alcanzan principalmente su superficie, lo que la torna de ese color rojizo tan llamativo que dio lugar al apelativo “Luna de Sangre”.
El eclipse del día 27 de julio, es el segundo eclipse total que se producirá este año, siendo visible en toda España. La fase de totalidad, se alcanzará hacia las 21:30 horas coincidiendo con la salida de la luna por el horizonte, pero no te preocupes, ya que dicha fase se prolongará hasta las 23:13 horas, y posteriormente se podrá ver como parcial hasta las 00:19 horas, así que…
A buscar un buen sitio y a disfrutar del espectáculo…